El gigante energético francés Total "financia la máquina de guerra de Rusia", afirma una ONG

"La UE debe actuar cortando... el GNL ruso mientras el pueblo de Ucrania sufre un precio inconmensurable", dijo un activista de Global Witness.

El gigante energético francés Total está alimentando la "máquina de guerra" de Rusia comprando cantidades masivas de energía rusa, afirmó una ONG.

Global Witness dijo que la compañía continúa comprando gas natural licuado (LGN) ruso, y su análisis sugiere que es el mayor comprador no ruso.

El jueves, TotalEnergies anunció 10.400 millones de euros de beneficios en lo que va de 2023, en medio del aumento de los precios de la energía debido a la guerra de Ucrania.

"Mientras Total celebra sus enormes ganancias, la gente en Francia, Ucrania y en todo el mundo no puede olvidar que la compañía sigue comprando gas ruso y enviando dinero a la maquinaria de guerra rusa", dijo Jonathan Noronha-Gant, responsable principal de campañas de Global Witness.

"No hay excusa para seguir comprando gas ruso, enviando fondos a un agresor que ha causado tanta miseria en Ucrania y ha amenazado la seguridad de Europa."

Total ha defendido sus acciones. En respuesta a las acusaciones de la ONG, la empresa dijo que estaba cumpliendo con las sanciones de la UE y condenó la guerra de Rusia en Ucrania.

También señaló que las compras rusas habían disminuido este año.

Global Witness afirmó que el gigante energético francés compró más del 10% de los envíos rusos de LGN, comprando casi 4,2 millones de metros cúbicos del combustible.

La organización de seguimiento destacó un contrato a largo plazo que permitirá a Total obtener enormes beneficios mediante la explotación de un gran yacimiento de gas en Siberia.

Desde la invasión rusa de Ucrania en 2022, la UE ha impuesto sanciones a las importaciones de petróleo y carbón procedentes de Rusia a través del mar.

El bloque ha reducido drásticamente su dependencia del gasoducto ruso, a pesar de no imponer sanciones al combustible.

Los países de la UE han aumentado sus compras generales de GNL ruso, socavando el compromiso del bloque de poner fin al uso de combustibles fósiles rusos para 2027.

El GNL sigue siendo una fuente clave de ingresos para el Kremlin y su guerra en Ucrania, con ventas en 2023 a Total y otros valoradas en más de 5.800 millones de euros, según Global Witness.

"Las ventas de gas no se diferencian del petróleo en que proporcionan fondos críticos para la maquinaria de guerra rusa", dijo Noronha-Gant, de la ONG.

Global Witness renovó los llamamientos para que la UE prohíba el comercio de GNL ruso y aplique un impuesto del 100% a las ganancias recibidas por estas empresas desde el inicio de la invasión.

"Después de 18 meses de conflicto, la UE debe dejar de permitir que empresas como Total compren gas ruso."

"Países como Francia, donde tiene su sede Total, y la UE deben actuar cortando... el GNL ruso, mientras el pueblo de Ucrania sufre un costo inconmensurable".

En respuesta a las afirmaciones de Global Witness, Total dijo que suspendería el comercio si la política de seguridad de la UE cambiara y se sancionara el gas ruso.

El apetito por abordar el tema está aumentando dentro de la Unión Europea de 27 miembros, pero no hay acuerdo sobre cómo hacerlo, ya que los riesgos de inflar los precios de la energía y aumentar inadvertidamente aún más los ingresos energéticos rusos son considerables.

Comparte este artículo